Se ejemplo y suelta…pero explica.


¿Qué es mas importante que la opinión que tienes de ti mismo? La que los demás opinan de ti. Para mí, la opinión de los demás nunca fue determinante. Fue mucho más fuerte lo que, según los demás, yo era capaz de hacer. 

Aunque seguramente me fue dicho con buenas intenciones, me llegó al cerebro de otra manera; “Tienes que ser así.” Tienes que ser bonita, fina. Tienes que ser inteligente, independiente. Tienes que ser buena cocinera, buena madre. Tienes que ser comprensiva, paciente. Tienes que cambiar el destino de todas las mujeres de esta familia. La frase “Eres capaz de…” la escuché como, “si no lo logras, serás un fracaso".

Y así viví, recordando esa frase mientras intentaba vivir feliz pero sin llegar a las expectativas. Pasan los años, lo intento, no lo logro. Soy un fracaso. Y escucho “no sé porque tienes tan baja autoestima, con lo que eres capaz de...” Hasta que, a los 36 años, me di cuenta y ahí cambió todo.


¿Porqué hasta ésta edad? ¿Porqué no a los 20 o antes de ser madre? No creo que tenga que ver con la cantidad de años vividos sino en la etapa de la vida en la cual estás. Creo, sin ninguna explicación científica, que son cuatro y sospecho que ahí está mi respuesta.


1. Absorbemos vivencias; olores, voces, frases, ejemplos.

2. Rechazamos los olores, las voces, las frases y, sobre todo, los ejemplos.
3. Retomamos los olores, las voces, las frases y, sobre todo, los ejemplos.
4. Añoramos los ejemplos, las frases, las voces y, sobre todo, los olores.

Estoy en la tercera etapa. Últimamente, los ejemplos que me dieron los veo en el espejo. No sólo lo poderosamente positivo es parte de mi identidad, sino también lo obstructivamente negativo. Pero ahora me doy cuenta que no es lo único que soy. Al retomar las vivencias de mi infancia y verlas en el espejo, veo que, en realidad, no soy lo que me dijeron que yo “podía” ser, sino soy lo que esas vivencias me hicieron por dentro para ser lo que hoy soy. 

¿Un cúmulo de errores? Tétrico. Más bien un cúmulo de repeticiones de acciones de generaciones anteriores que no me tocaban por decisión propia, sino por haber entendido mal la frase “Eres capaz de...”. Es tal el miedo que siente el alma al ver lo que es esperado de él que, después de intentar a toda costa ser lo que es y ser eternamente limitado, mejor repite los ejemplos que vio. Resulta mucho más fácil.

Así que esto es, aparte de una llamada de atención personal, una petición. Date cuenta que la frase que crees haber escuchado ni siquiera fue pronunciada. Que eres lo que tú quisiste ser, nadie más es responsable de tus pendejadas. Y por favor, si tienes hijos, antes de confundir más al alma que está dentro de ese cuerpecito, explícale la frase.

No hay comentarios:

Publicar un comentario